Y según dicen el pollo da colágeno…


Este fin de semana mientras caminaba por un centro comercial, vi varios grupos de persona que llamaron mi atención y estoy segura que ustedes también las han visto ya sea en un centro comercial, en un restaurante o en cualquier lugar por el que pasan en su día a día. El primer grupo estaba conformado por aquellos que disfrutaban de su primera cita, y es que es impresionante como se puede llegar a ser tan evidente, en estos casos. Las risitas, las miradas y hasta las caricias nerviosas los delataban, incluso llegue presenciar un incómodo momento en que el pobre Romeo no tenía suficiente dinero para invitar a su Julieta a una Dona y un café, por lo que decidió simplemente decir que mejor fueran a caminar…que oso. Pero bueno ese tema de los desastres en las primeras citas, ya lo hablaremos después.
El segundo grupo que me llamo la atención fueron las de los amigos que están en la friendzone, lastimosamente esta situación también es bastante evidente pues hay quienes no logran disimular los sentimientos hacia sus amigos y en estos espacios abiertos  suelen mostrarse más cariñosos de lo que deberían.
Y el tercer y último grupo es el de las Chuchibarbies, el cual me sorprendió… pues al parecer es temporada de chuchiabarbies y en cada tienda logre vislumbrar un par de esta especie. Es por esto que hoy quiero hablar de este tema, más de uno(a) ha vivido de cerca esta situación, conoce alguna historia o por lo menos como en mi caso quiere evitar a toda costa llegar a esas alturas… aunque yo no diría alturas, diría más bien bajezas, pero bueno sin más preámbulo entremos en materia:

¿Qué es una chuchibarbie?: Para nosotros los colombianos este término es bastante común y entendible, pero para las personas que nos leen de otros países, una chuchibarbie es aquella mujer de mediana o avanzada edad que se niega a aceptar su edad y por lo tanto gracias a algunas ayudas del quirófano y a su extravagante forma de vestir, aparenta tener unos 15 o 20 años. Obviamente no lo logran pero ellas juran y comen tierra que se ven más jóvenes, de lo que lo son en realidad. Personalmente no he logrado entender cómo se puede llegar a este nivel, es decir siempre se ha dicho que después de cierta edad las mujeres empezamos a quitarnos los años y es hasta entendible quitarse uno o dos añitos, pero querer quitarse 15 o 25 años… pues tampoco. Ahora pues veamos algunos ítems con los que se compone esta maravillosa especie:

Accesorios: Como toda Barbie, esta chuchibarbie, viene dotada de una gran cantidad de accesorios, por lo general accesorios que usarían sus hijas y hasta nietas pero que a ellas no parece importarles y los adoptan como accesorios de su día a día. En cuanto a vestuario la chuchibarbie tiene un closet bastante amplio en el cual se pueden encontrar horripilantes blusas que muestran el ombligo (solo que ellas no entienden que esas blusas son para mostrar esos ombligos que adornan abdómenes planos), espantosos pantalones bastante apretados, de colores extravagantes y hasta con rotos en las piernas (los cuales no hacen otra cosa que sacarle los gorditos laterales de lo apretados que les quedan), horrorosas blusas con alucinantes escotes los cuales no dejan nada a la imaginación, (pero al parecer eso de la imaginación para ellas ya está obsoleto) y de los zapatos ni hablemos porque los únicos que les hacen falta son de esos que tienen lucecitas y hablan, porque de resto cualquier zapato lobo ellas lo tienen. El maquillaje es bastante estrambótico  (sin duda ganarían un concurso de maquillaje de Halloween) y los perfumes, bueno si así pueden llamarse, porque más bien utilizan es puro pachulí barato…esos son otro cuento de terror. Lo peor es que ellas juran que se ven divinas y que con esto logran cautivar a los Ken de la vida real, lo que no saben es que con ello logran todo lo contrario.
Las cuchibarbies

Actitud: Las barbies se caracterizan por tener una actitud alegre y espontanea en cada una de las situaciones a las que se enfrentan, por lo tanto estas cuchibarbies también actúan de manera alegre (demasiado alegre para ser sinceros), su actitud siempre es jovial por aquello que deben parecer chicas de veinte. Lo que no saben es que las chicas de veinte no son tan locas como ellas intentan serlo. Tienen un talento excepcional para organizar fiestas, para beber trago y sobre todo para hacer el oso cuando están borrachas, claro que también pueden sacar ese talento cuando no lo están. Se creen bailarinas profesionales y por lo tanto se le miden a bailar cualquier ritmo que exista en el mundo mundial. Desde reggaetón hasta ranchera, ellas les bailan lo que sea, encima de una mesa o encima de un colchón. Por lo general adoran salir de fiesta con hombres más jóvenes que ellas y en algunos casos no importa si son casados o solteros, desde que tengan plata y les gasten el trago, ellas pueden recompensar el pago de otras formas.

Su Ken: Su lema es ese de “el pollo da colágeno”, por lo que solo salen con hombres mucho menores que ellas… esos que nosotras las chicas normales rechazamos por inmaduros, ellas los prefieren y son felices cuando hay alguno a su alrededor. La verdad es que no le veo la lógica porque en su momento también los rechazaron, pero por algo los prefieren. Sin embargo cabe aclarar que muchos les rehúyen, y ¿es que con esas pintas pues quien no? Pero hay otros a los que eso les gusta, tal vez porque les aporta algo de experiencia o porque tienen algún complejo con las personas mayores, vaya usted a saber…que cosas pasan por la cabeza de un hombre. El hecho es que una vez, las “señoras” logran cautivar a uno de estos jovencitos, estas tratan de hacer todo lo posible para retenerlos y es que al parecer su nivel de seguridad cae al piso. Las pobres andan con un pánico todo el tiempo, porque se imaginan que el tipo las va a dejar por otra más joven (y va uno a ver y sí…) por lo tanto empiezan a hacer cosas algo extrañas, como celar al tipo por todo, se convierten en las más intensas, y en el caso de las que tienen un poco más de dinero, llenan al tipo de regalos, se los llevan a viajar, y hay casos en los que llenan a los tipos de fotos y videos bastante subidos de tono, solo para que recuerden lo que pueden llegar a perder, si las dejan.

Sin embargo quiero aclarar que mi problema es con este tipo de chuchibarbies, porque hay otras veteranas que a pesar de sus años se conservan muy bien y se ven muy pero muy bonitas, sin necesidad de aparentar lo que no son. Es el ejemplo de Demi Moore, la vieja con 53 años se ve divina, su aspecto simple y descomplicado le realza la belleza y hasta se logró levantar al papasito de Ashton Kutcher. O que me dicen de Sandra Bullock que también a sus 51 años se ve regia y no tiene que andar mostrando tetas y ombligo para llamar la atención. Otro caso es Charlize Theron, esa se lleva el premio, a sus 40 años parece de 20 y sin esfuerzo, ojala cuando grande me vea como ella, solo que no tengo el cabello rubio… ni los ojos claros…ni la piel tan blanca... En fin, y para no irnos muy lejos que me dicen se esta señora Pilar Castaño, la vieja a sus 63 años tiene un estilo único y más de una debería prestarle atención sobre cómo se debe vestir.

Las veteranas



Así podría continuar porque la lista es larga… así que para terminar solo me queda decir que por mi parte solo espero tener una vejez digna, si me salen arrugas, que hijuemadres serán mis heridas de guerra, que si se me blanquea el pelo, el blanco siempre está de moda y así con cada achaque que llegue. Solo espero que ustedes mujeres acepten su edad sin ningún problema, eso de quitarse la edad está mandado a recoger y si lo hacen terminaran pareciéndose a la Tigresa del Oriente… y de más viejas como esas ¡libranos jebus!.

La tigresa del Oriente
Cat...

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