Quien me conoce bien sabe que la
música y yo somos uno solo, no soporto la vida sin música y si por alguna razón
de peso debo dejar de escucharla por un día, al final de este me siento enferma
y mi humor cambia totalmente. Pero no escucho cualquier música, la salsa y el
vallenato obviamente no entran en mi lista de favoritos, el primero porque para
mí que la salsa no es para escuchar, es para bailar (pero se salvan unas muy
pocas canciones). Y el segundo porque sencillamente odio el vallenato, bueno el
reggaetón tampoco lo incluyo porque básicamente esa porquería no es música. Y
la música popular, bueno esa tampoco sencillamente porque no va conmigo. De
resto la gran mayoría de géneros los escucho o por lo menos me los aguanto.
Es por eso que me puse a pensar en
cómo en la industria musical, encontramos canciones para todo tipo de situación
por la que estemos pasando. Estoy segura que si les pregunto que canción podría
ser seleccionada como la banda sonora de sus vidas, no habrá una en particular,
de hecho habrá una por cada acontecimiento importante en sus vidas. La canción
que le recuerda a su primer amor, la que le dedicaron en su época de colegio,
la que escucho mientras hacia el amor con fulanito o la que dedicó cuando lo hacía con sultanito, la que le
recuerda a sus hijos, esposo, abuelitos,
primos, amigos… en fin hay muchas canciones que hacen parte de nuestras vidas y
que sin duda nos traen recuerdos.
Pero hoy quiero hablarles de esas
canciones que no se deberían escoger bien sea como icono de sus vidas o
simplemente para dedicarle a alguien. Aquí les dejo mi top 5:
Yo no sé Mañana – Luis Enrique (Esta es de mis favoritas): Si ya le
dedicaron o le llegan a dedicar esta canción, no lo celebre y mucho menos lo
publique en Facebook como si fuese el mayor logro que nadie más ha alcanzado.
Es más ni le dé las gracias a la persona que se la dedicó, porque la dichosa
canción no es nada romántica, por el contrario es la mejor forma de deshacerse
de alguien diciéndole entre líneas y con palabras bonitas que lo que paso entre
los dos, fue cosa de una sola noche y que lo más probable es que no se repita y
que por lo que más quiera no lo presione ni le pregunte si van a seguir siendo
algo, porque no tiene ni puñetera idea de lo que va a pasar. Esto probablemente
porque el tipo está pasando por la fase más fuerte del guayabo y hasta ahora
está entendiendo lo que pasó la noche anterior y por lo tanto se está
arrepintiendo. Sí, lo sé es muy buena (risas de fondo), mentira, la verdad es
que pobre la que pensó que esa canción era lo más romántico del mundo, pero ya
que lo sabe si se la llegan a dedicar, colóquese un anillo bien grueso en el
dedo del medio y dele un golpe en la cara al que si quiera se atreva a insinuársela.
Tu reputación – Ricardo a
Arjona: Espero que a nadie le hayan dedicado esta canción y espero que nadie la
dedique… y si ya es muy tarde, mi sentido pésame. Y es que para nadie es un
secreto que las canciones de Ricardo Arjona son controversiales, hay quienes lo
aman y hay quienes lo odian, personalmente no lo odio ni lo amo más bien esta
en esa pequeña línea que divide el bien
del mal, pero con esta canción más del lado del mal. Aunque en mi concepto la
idea es muy buena su contenido es fuerte, nada más empezando la canción esa
parte de “Tu reputación son las primeras seis letras de esa palabra” ¡wow,
fuerte! (El que lo entendió lo entendió). Es por eso que si usted va dedicar una canción del tipo, léala y reléala
antes, no sea que la embarre y créame que a nadie le gusta que le digan puta
así sea de la forma más sutil posible.
Vivir mi Vida – Marc Anthony: Esta canción es muy buena bailar y
tal vez para resurgir de las cenizas como el Ave Fénix. Pero no la dedique y no
la cante a grito herido, no le dé el placer a los demás de ver lo mal que lo
paso o lo mucho que ha sufrido, si la canta muy probablemente el mensaje que
quiere dar es que a partir de ahora ya no va a seguir sufriendo y llorando por
alguien, cuando usted y yo sabemos que eso no se decide de un día para otro,
eso requiere semanas y hasta meses para
poder lograrlo. Si usted canta esa
canción y la hace suya a la semana de pasar por una tusa, el único mensaje que
va a mandar es que aún no lo ha superado
y que por el contrario está peor que hace unos días. Así que piénselo bien
antes de irse a un bar a cantar a grito herido esta canción mientras se sube a
una mesa.
Que lloro – Sin Bandera: Ya para terminar una canción corta-venas,
sé que en algunos momentos hemos estado en la inmunda y este tipo de canciones
no hacen más que meterle sal y limón a la herida, y que entre más la escuchamos
más nos dan ganas de llorar. Pero no se apropie de esta canción ni mucho menos
la deje sonar mientras llama al susodicho. Tenga dignidad y así este hecha un
mar de lágrimas y haya acabado con los pañuelos desechables de todas las
tiendas alrededor, jamás reconozca lo mal que está, porque lo único que va a
lograr es inflarle el ego al tipo y por lo tanto menos va a querer volver con
usted. Así que si quiere llore todo lo que quiera mientras la escucha, pero
escúchela, grítela y golpee cuanta almohada se le cruce por enfrente pero asegúrese
de que esté sola.
Por mi pondría muchas más… pero
estas son mis favoritas, ahora repase su lista de canciones las veces que
quiera y compárela con esta si alguna le coincide, táchela y haga como que eso
nunca paso. En otro post les compartiré las canciones que si se pueden dedicar
sin temor alguno más bien que al dedicarlas deja un fresquitooo.
Cat…
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